Vacaciones de Infier... Invierno

Estoy pachonchita. Extra-pachonchita. Y puedo concluirlo debido a las grandes masas de comida que he comido (No me digas) durante éstas vacaciones.
Para mi fortuna, tengo un jeans-hermosos-azules marca Sybilla que son semi-de-tiro-alto y esconden la gran guata que en realidad tengo, me encantan, GRACIAS POR SALVARME.

Así me veo cuando uso mis pantalones de tiro alto, glamourosa, sin una pizca de guata

Mis gigantescos atracones, producto de la gula que me invade hace ya algunas semanas, no es en realidad CULPA MÍA. Es culpa de Hermano y Familia en general. 

No todos lo saben, pero mi comida favorita-favorita es el SUSHI. Ay, gran maestro creador del sushi, serías la persona a quien más le agradezco tan divina, hermosa, deliciosa (y a veces más deliciosa en su formato frito) creación.
No entiendo a la gente que no le gusta el sushi. Si les gusta el arroz, la palta y el pescado (no siempre a la gente le gusta el pescado, pero para eso está el pollo (Tomen, gente que no le gusta el sushi)) ¿Por qué no les gustaria el sushi? Además que a quién no le gusta lo frito, a eso si que no se pueden negar, guatonsines. El sushi es la combinación de todo lo bueno de la comida y reducido en calorías, además que es la comida menos-chatarresca que conozco que es exquisita. 
Por eso, ahora le haré una oda al sushi:

Oh, sushi, que con tus delicados ingredientes
Nos dejas los rolls en el diente
Por eso deberías ser una fuente infinita
Para los que les gustas, pura gente finita (shiaa)

Ya filo (me juí en la media volada), a lo que iba es que siempre tengo ganas de comer sushi, entonces en un intervalo de tiempo de más o menos, 3 minutos y medio (calculado científicamente) me quejo y empiezo a decir: "Tengo hambre, QUIERO SUSHI"
Para su sorpresa, Familia proviene de una extraña especie anti-sushi, por lo cual cuando emito estas palabras, ponen cara de asco y se niegan rotundamente a comer tal manjar de Dioses. Como soy 1 vs. 3, tengo yo que ceder, y entonces propongo otra genial, pero no tan genial idea, que es, no sé, comer pizza. En el mismo instante, Familia pone cara de perro, sacan sus largas lenguas y comienzan a babear, diciendo: "ZI, EZO EZ LO QUE COMEREMOZ". Resignada y cabizbaja, espero la orden de pizza, que, obviamente, igual disfruto, pero con más culpa de engordar. TODAS LAS VECES PRÓXIMAS A ÉSTA, PROCEDEN DE LA MISMA FORMA. Conclusión: Familia me hace engordar con comida chatarra y no me satisface con sushi. u.u.u.u

Como soy la máxima pedidora de sushi, cuando íbamos a ir a la nieve, también pedí, y Mamá, dijo "Sí, podría ser"; Ilusionada, espere hasta el día esperado (No me digas) y, wow adivinen qué, el sushi no apareció :(

¿Quién se podría resistir a tanta maravilla?

Bueno, llegamos a la Nieve, con Familia y Amiwa (Para diferenciarla de Amiga, quién apareció anteriormente). ME ENCANTA LA NIEVE. Me encanta estar aglobada con mi parka-michelin, pantalones-gordos, botas-gordas, gorro, lentes, guantes-gordos, y poder acostarme en la nieve mirando hacia el cielo. Es una de las sensaciones de comodidad más grandes del Universo, podría hasta sacar mi línea de "Camas-Nieve", venderlas por el mundo y hacerme rica y famosa, porque la nieve, ay, es hermosa y blanda (a veces).

Yo acostada en mi Cama-Nieve®

La casa de la nieve es de un tío ULTRA-RICO que vemos CALETA de veces al año (estoy entre nunca y una vez) y queda en Valle Nevado... piola ¿o no?.
Cuando entramos en el SOBRIO departamento, me di cuenta de que era mejor que mi casa (Sick Sad World), porque, aunque no lo crean, tenía 2 teles plasma CON CABLE, calefacción del piso, 3 piezas en las que se distribuía una cama matrimonial, un camarote, y 3 camas en una pieza, además, y no menos importante, tenía 2 baños y una pequeña terracita.
AH, y en la bodega, no tenía nada más ni nada menos que como 6 pares de botas de ski y, wow sorpresa, Skis (Nótese la marca Rossignol).

Lo malo de ir a la nieve, es que todos están todo el rato esquiando y snowboardeando, y yo no sabía, porque en realidad ME CARGAN los deportes (menos natación). Soy la persona más floja de la vida. Pero había un GRAVE problema. Amiwa estaba demasiado-DEMASIADO entusiasmada con aprender a esquiar. Hermano ya sabía. Papá, además de ser semi-animal, fué socorrista esquiador en Francia en una de sus vidas pasadas, por lo cual, si Amiwa quería esquiar, Hermano quería esquiar, NOS llevarían a esquiar y estaría obligada bajo la órdenes de Papá-Monstruo (O sea, Papá de día).

La gente deportista se preguntará por que me cargan los deportes y no es una cosa tanto de flojera, NO, peor aún, porque aunque me gustara, no podría hacer nada porque SOY DEMASIADO TORPE. 

Después de unas tiradas mortales en trineo (No estoy bromeando cuando digo MORTALES),  donde me hice una herida fea en el tobillo porque me quemé con la nieve (Increíble pero cierto) decidimos ir a aprender a esquiar en una parte más novata, que se llama Parque Nieve (seguramente uds. ya lo han visto, ya que su publicidad te la encuentras hasta en la sopa) y me puse mi primer par de ski. TERROR. Obviamente y como ustedes ya se habrán imaginado, entré en pánico y le dije a Papá que me los quería sacar, que no podía hacer lo que el me decía, me estaba cayendo de poto prácticamente porque los skis se me iban para atrás, y un sinfín de quejas de pánico. Lo peor de todo fué cuando Hermano, al lado mío, me dijo: "ya, tirate por esta cuesta que es chiquitita". HORROR, ANTE MIS OJOS, LA CUESTA MAS GRANDE QUE HABÍA VISTO.

Así la veía yo, gigante, empinada y con rocas abajo con las que me podía matar.

Pero, en realidad, la cuesta era así:

Después de un largo rato de reflexión en mi mente (aprox. 1 minuto) mi hermano me gritaba, desesperado: "YAPO IDIOTA, TÍRATE"
Entonces me dije a mi misma: "Sí, Dani, yapo, no pensí tanto You only live once (YOLO, a la moda)"

Y me tiré.

Yo pensé que me pasaría esto:

Yo enterrada, con las patas para afuera 

Pero lo que pasó en realidad fué esto:

Foto sacada por Papá. Esta soy yo.

Esquié como una profesional. Ahora me llamarán para las olimpiadas.

No soy tan torpe como pensé. ESTOY FELIZ.